NOVENA A SANTA CATALINA DE SIENA
Día octavo
Vivir en la Verdad
Catalina entiende que en la morada interior hay dos
celdas: La del conocimiento de sí y la del conocimiento de la bondad de Dios
pero, de hecho, son inseparables. Catalina
advierte del peligro de prescindir de una de ellas, con lo cual
correríamos el riesgo de caer en la desesperación o en la soberbia, porque
fuera de Dios tenemos una visión parcial de lo que somos y podemos sucumbir
bajo el peso de nuestra fragilidad. Por otra parte, el que conoce a Dios, sin
conciencia de la propia fragilidad, puede caer en la presunción. Por lo que la
santa concluye: “Es necesario que una y otra se hagan una misma cosa, y así vendrá
la perfección.”
En la hondura de nuestro ser se nos revela el amor de
Dios y nos vemos impulsados a rechazar el mal y el pecado que están enraizados
en nuestra naturaleza; nos abrimos al perdón y nuestra debilidad se convierte
en camino de encuentro con Dios que acoge nuestra pobreza y la transforma en
apertura incondicional a Él y al prójimo.
El conocimiento de nosotros y de Dios en verdad,
supone reconocerle como origen, centro y meta de nuestra vida: Su gracia y la
virtud de su poder, actúan en la criatura y llevan a plenitud sus ansias de trascendencia,
respetando el ritmo de la naturaleza humana y la libertad de la persona.
Catalina supera toda concepción dualista que suponga contraponer lo corporal y
lo espiritual, lo humano y lo divino, lo natural y lo sobrenatural; y da pautas
claras de integración y de una visión global de la persona, que toda ella, con
su psicología, cultura, realidad física, ha de encontrar su realización, es decir,
vivir en la verdad dando cauce al crecimiento personal no a costa del
espiritual, sino simultánea y estrechamente unida a la vida del Espíritu.
OREMOS:
Oh Dios, que nos enseñado por medio de
la Bienaventurada Catalina a llegar al
conocimiento de tu verdad en el simultaneo y admirable conocimiento de nosotros
en ti y de ti en nosotros; concédenos,
por su intercesión, progresar de forma tal en el conocimiento perfecto
de Ti, que podamos amarte y servirte cada día mejor. Por Cristo NS…
Santa Catalina de
Siena, Ruega por nosotros.